Financiamiento y opciones de préstamos para minicasas
1 de may del 2025
•lectura de 7 minutos
Una minicasa puede sonar como una opción llamativa si estás buscando mudarte a una casa más pequeña o disfrutar de un estilo de vida más simple. A muchos compradores de vivienda les interesa el estilo de vida de una minicasa por su encanto minimalista y costo de vida más bajo. Pero, ¿cómo financias una minicasa?
La mayoría de las personas que compran una casa sacan una hipoteca para financiar la compra. Un préstamo hipotecario te permite pagar una casa a lo largo de un período de tiempo, generalmente de 15 o 30 años. Sin embargo, con una minicasa, estas opciones de hipoteca muchas veces no están disponibles.
¿Puedes obtener un préstamo hipotecario para una minicasa?
Muchos prestamistas hipotecarios tienen una cantidad mínima para los préstamos que es más que el costo de construir o comprar una minicasa. En promedio, el costo de una minicasa está en el rango de $30,000 – $60,000, aunque las minicasas pueden ser mucho más baratas (o más caras) dependiendo de las características que quieras incluir. Si el préstamo más pequeño que un prestamista hipotecario ofrece supera el costo de una minicasa, como suele ser el caso, no será posible obtener una hipoteca para comprar la minicasa.
Algunos prestamistas hipotecarios también piden que la casa esté construida sobre cimientos permanentes, pero para muchas minicasas no es así. Actualmente Rocket Mortgage® no ofrece préstamos hipotecarios para casas que no están construidas sobre cimientos permanentes. Además, un prestamista hipotecario podría requerir una superficie en pies cuadrados mínima que una minicasa no cumple porque muchas de ellas miden menos de 400 pies cuadrados.
Financiamiento y opciones de préstamo para una minicasa
Entonces, ¿cómo financias una minicasa? Estas son varias opciones viables de financiamiento que no implican una hipoteca tradicional.
Préstamo personal
Que te aprueben un préstamo personal es una de las formas más usuales de conseguir financiamiento para una minicasa. Un préstamo personal suele ser un préstamo sin garantía, lo que significa que el prestamista no retendrá nada tuyo como colateral en caso de que dejes de pagar el préstamo, aunque tu crédito sufrirá si lo haces. Un préstamo personal puede tener un plazo de reembolso hasta de 7 años y podría financiar parte o todos los costos de tu minicasa.
Un préstamo personal puede ser una excelente opción para pagar rápidamente los gastos de tu minicasa, pero los pagos mensuales pueden ser altos debido a la duración del plazo del préstamo, que será bastante más corto que el plazo de pago de una hipoteca. La tasa de interés para la que califiques dependerá en gran parte de tu perfil de crédito. La tasa porcentual anual (APR) de un préstamo personal puede variar entre el 3% y 36% de la cantidad del préstamo. Los prestatarios con una puntuación de crédito buena o excelente generalmente califican para una tasa de interés más baja que una persona con una puntuación baja.
Préstamo para un RV
Es posible que puedas financiar una minicasa con un préstamo para un RV si tu minicasa no está sobre cimientos permanentes y puedes moverla. Normalmente, puedes pedir un préstamo para RV por medio de un prestamista en línea, un banco o una cooperativa de crédito. Para obtener un préstamo para un RV, tu minicasa debe considerarse apta para la carretera según la Asociación de la Industria de Vehículos Recreativos (Recreation Vehicle Industry Association, RVIA) y cumplir las normas establecidas por la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (National Highway Traffic Safety Administration) del Departamento de Transporte de Estados Unidos (U.S. Department of Transportation).
Para calificar para un préstamo para un RV con algunos prestamistas, es posible que tengas que comprometerte a que tu minicasa sea tu residencia principal. Seguramente el plazo de reembolso de tu préstamo será más largo y manejable con un préstamo para un RV que con un préstamo personal, pero puede ser que te pidan un down payment.
Además, con los préstamos para un RV, tu minicasa también será el colateral del préstamo. Entonces, si incumples con los pagos del préstamo de la minicasa, el prestamista puede tomar posesión de tu casa.
Financiamiento con el contratista o constructor
Si trabajas con un contratista o constructor de minicasas, es posible que pueda ayudarte a conseguir financiamiento para tu minicasa. Algunas compañías construyen minicasas y ofrecen préstamos para financiarlas. La empresa contratista o constructora suele hacerlo trabajando con un prestamista para ayudar a los compradores a conseguir préstamos mediante su empresa.
Antes de aceptar cualquier cosa, investiga el tipo de financiamiento que te ofrece un constructor o contratista de minicasas. La tasa de interés y el plazo de reembolso del préstamo variarán dependiendo de tu prestamista, y es posible que no siempre obtengas la mejor oferta.
Dinero en efectivo
Pagar una minicasa al contado es quizá el método de financiación más aconsejable. Si puedes pagar tu minicasa por completo, no tendrás que preocuparte por reembolsar ningún tipo de préstamo. Aunque no es una opción posible para todos, es la más conveniente si quieres pagar menos a la larga. Pagar en efectivo también te puede ayudar a evitar los riesgos asociados a pedir un préstamo para financiar tu minicasa.
Tarjeta de crédito
También puedes cargar el costo de tu minicasa a tarjetas de crédito, pero esta podría ser la opción menos factible y no recomendable. Necesitarías un límite de crédito lo suficientemente alto para cubrir el costo de tu minicasa. A menos que compres o construyas una minicasa bastante barata, quizá esta no sea una opción de financiamiento realista.
También debes considerar los intereses que pagarás si compras una minicasa con una tarjeta de crédito, pero no pagas el saldo total del estado de cuenta cada mes. Si no puedes pagar el costo de tu minicasa de un solo, la compra podría acumular intereses con el tiempo y volverse demasiado cara para pagarla.
Lo que debes saber antes de obtener un préstamo para una minicasa
Aunque las minicasas pueden ser encantadoras y menos caras que la vivienda tradicional, implican algunos retos. Antes de decidirte por comprar una minicasa, te recomendamos que consideres varios factores clave en tu proceso de toma de decisiones.
1. Necesitas un terreno en donde construir
Ya sea que tu minicasa esté sobre cimientos permanentes o no, necesitarás algún tipo de terreno para que apoyarla. La tierra no es gratis, así que seguramente también tendrás que financiar un terreno si no construyes tu minicasa en una propiedad existente.
Para obtener un terreno, posiblemente necesitarás algún tipo de préstamo para terreno, a menos que pagues alquiler por la propiedad. Una vez obtengas el financiamiento para el terreno, tendrás que considerar factores como las normas locales de construcción y las leyes de zonificación. Las leyes de zonificación pueden dictar lo que está permitido construir en el terreno que compraste.
Si no hay electricidad disponible en el lote que elegiste (como el caso de un terreno no urbanizado), tendrás que descifrar cómo llevar agua y electricidad a tu minicasa. Esto puede llegar a ser caro, especialmente si el lote que elegiste está lejos del agua de la ciudad y del proveedor de servicios públicos más cercano.
Podrías alquilar un terreno en lugar de comprarlo, pero estos costos pueden acumularse con el tiempo. El lado positivo es que algunas zonas ofrecen comunidades de minicasas en las que puedes alquilar terrenos destinados para estacionar minicasas. Estas comunidades suelen tener los servicios públicos y otros servicios ya establecidos.
2. El valor de reventa suele ser bajo
Un motivo por el que muchos prestamistas dudan en financiar las minicasas es su valor de reventa bajo. Como muchas minicasas están construidas sobre ruedas y se pueden mover, su valor se deprecia mucho como los autos y RV.
Similar a otros vehículos, las minicasas son vulnerables al desgaste asociado con el uso a lo largo del tiempo. Además de hacer que una casa pequeña se deprecie, el desgaste puede representar un mantenimiento costoso.
3. Si tu casa se mueve, necesitas algo para moverla
Si alguna vez quieres reubicar tu minicasa y no está construida sobre cimientos permanentes, es posible reubicarla, pero por lo general necesitarás un vehículo más grande (como un picop) para remolcarla a su siguiente destino. Los picops suelen consumir bastante combustible, lo que puede suponer una carga para su bolsillo a la hora de llenar el tanque.
El lado positivo es que puedes llevarte tu casa a casi cualquier lugar del territorio continental de Estados Unidos. Ser propietario de una casa móvil es en cierto modo un arma de doble filo: obtienes libertad a cambio del costo (y las emisiones de gases de efecto invernadero) asociado al traslado de la casa a distancias potencialmente largas con un vehículo relativamente grande.
4. No puedes estacionar la minicasa simplemente en cualquier lugar
Mientras que muchos propietarios de minicasas deciden ubicar su casa en un terreno y no moverla nunca, otros adoptan la naturaleza potencialmente móvil de la vida en una minicasa y la usan para viajar del mismo modo que muchas personas usan un RV o una caravana.
Numerosos campamentos y parques nacionales de todo el país permiten a los visitantes permanecer en sus tierras durante un largo período de tiempo. Esta puede ser una excelente opción para los propietarios que buscan viajar y hacer turismo desde la comodidad de una minicasa.
Sin embargo, no todos los campamentos permiten estacionar minicasas en sus tierras, así que lo mejor es investigar dónde sí puedes hacerlo. Tendrás que pagar un cargo diario, semanal o mensual para quedarte en campamentos y parques, lo que quizá no sea mucho más barato que alquilar un apartamento o una casa. La mejor opción para ti dependerá probablemente de tu ubicación y de la duración de tu estancia.
5. Una casa tradicional pequeña podría ser una mejor opción
Como muchas minicasas miden menos de 400 pies cuadrados y no reúnen los requisitos para obtener financiamiento hipotecario, puede ser que la compra de una minicasa no esté en tu destino. Si quieres vivir en una casa más pequeña, particularmente una que sea estacionaria y no se mueva del terreno donde está, pero no tienes los fondos para comprar una minicasa, podría interesarte comprar o construir una casa tradicional más pequeña de lo usual.
Puedes obtener un préstamo conforme convencional si una casa:
Está sobre cimientos permanentes
Mide al menos 12 pies de ancho y 400 pies cuadrados
Es una residencia unifamiliar
Además, si se trata de una casa manufacturada, debe estar clasificada como bien inmueble.
Y, una vez que la casa sea reubicada al terreno o lote donde descansará, no se puede mover.
Conclusión: Vale la pena explorar las opciones de financiamiento de las minicasas
Aunque tus opciones para financiar una minicasa son limitadas, es totalmente posible comprar una. Tus opciones de préstamo principales incluyen préstamos personales y préstamos para un RV, pero algunos compradores la pagan de contado. Antes de financiar tu minicasa, considera el terreno que necesitarás para construirla o estacionar, los servicios públicos disponibles y si planeas vender la minicasa en el futuro.
Si tu futura casa supera los límites de tamaño de las minicasas, está sobre cimientos permanentes y cumple los requisitos para el financiamiento tradicional, puedes optar a una hipoteca. Comienza el proceso de solicitud de un préstamo hipotecario con Rocket Mortgage y está un paso más cerca de mudarte a la casa de la que quieres hacer tu hogar.
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